Errejón recusa a la juez que quiere sentarle en el banquillo por patear a un enfermo de cáncer de colon
La defensa del Líder de Más País ha presentado un escrito para quitarle la causa al juzgado que la instruye
Según fuentes jurídicas consultadas por este diario los abogados de Errejón no se esperaban que la juez fuera tan escrupulosa solicitando pruebas
La juez acusa a Íñigo Errejón de un «delito de maltrato» por su patada a un jubilado con cáncer
Íñigo Errejón será juzgado a la vuelta del verano por la patada a un jubilado enfermo de cáncer
Este es el vídeo de la agresión de Íñigo Errejón a un jubilado con cáncer de colon
Podría decirse que Margarita Valcarce, la juez que investiga a Íñigo Errejón por un delito de agresión o maltrato, ha hecho demasiado bien su trabajo instruyendo la causa contra el diputado nacional. Su señoría, al recibir el atestado policial, pidió informes forenses y citó a los testigos y al perjudicado para mantener o descartar seguir investigando a Errejón como presunto autor de los hechos. Además, la juez insistió en que las imágenes de las cámaras reveladas en exclusiva por OKDIARIO se tratarán de mejorar al máximo. Todo para ofrecer las mayores garantías en el procedimiento. Pues todo eso ha pillado con el paso cambiado tanto a Errejón como a sus abogados, quienes ya han presentado un escrito de recusación contra la juez Valcarce.
Vamos por partes. ¿Cuándo prevé la Ley la recusación de un juez? Esta figura jurídica se utiliza para evitar conflictos provenientes de una enemistad manifiesta entre las partes, un pleito pendiente o tener interés en la causa. La titular del juzgado de instrucción 16 de Madrid no incurre en ninguno de esos supuestos, pero hay otro motivo al que se ha aferrado la defensa de Errejón: que el juzgador intervenga en la instrucción de la causa. Sin embargo, fuentes jurídicas han explicado a este diario que esta causa pierde fuerza después de que el procedimiento contra Errejón haya sido transformado y se hayan acelerado los plazos para que se siente en el banquillo de los acusados.
Tal y como anunció OKDIARIO en primicia, la juez ya no investiga a Errejón por un presunto delito de agresión con lesiones sino por uno de agresión o maltrato. Lo hace porque la forense del juzgado no puede vincular el empeoramiento de una lesión del denunciante, una hernia en el vientre, con la patada que asegura le dio el diputado nacional. Esa transformación no es baladí, porque somete a Errejón a la justicia ordinaria al dejar sin efecto el aforamiento que le otorga su acta de diputado. Pero es que además la calificación más leve del delito hace que, como ha anunciado OKDIARIO, sea cuestión de dos o tres meses el plazo para que se le juzgue.
Que el delito que se investiga sea ahora leve trae otra consecuencia: la juez instructora puede ser la juez juzgadora según fuentes jurídicas consultadas por OKDIARIO en el ámbito de los delitos menos graves. Dado que las instrucciones no son complejas, no suele haber objeciones a que instructor y juzgador sean la misma persona
La juez no quiere retrasos innecesarios
Entonces, ¿puede el escrito de recusación de Errejón paralizar o retrasar el juicio? Parece que no, ya que la juez Valcarce lo que ha decidido es no pronunciarse sobre esta petición de recusación y dar traslado a las partes, incluida Fiscalía, para que se pronuncien. De hecho, la propia juez ha dejado claro que si lo hace es para evitar dilaciones en el proceso contra Errejón.
Pero más allá de formalismos, lo que OKDIARIO ha podido saber es que la defensa de Íñigo Errejón se ha visto sorprendida por la diligencia de la juez, que no ha sido ni mayor ni menor que en otros casos. Lo que sucede, según las mismas fuentes, es que Errejón y sus abogados se esperaban un carpetazo a la causa sin que apenas haya nada que investigar. Y eso no es precisamente lo que ha sucedido. Tras recibir un completísimo atestado policial, la juez Valcarce lo único que ha hecho es seguir página a página el citado atestado.
Fueron los policías de la comisaría de Centro de Madrid los que recogieron la denuncia del hombre de 67 años con cáncer que aseguraba haber sido agredido por Errejón. Estos agentes localizaron a los testigos, localizaron las cámaras que pudieran haber grabado imágenes de interés aquella noche y todo lo pusieron negro sobre blanco en el informe que recibió su señoría junto con los informes médicos del denunciante, quien, entre otras secuelas, tuvo que interrumpir su tratamiento de quimioterapia tras empeorar visiblemente la hernia sufrida tras someterse a una operación de cáncer de colon.
Sin embargo, ha habido otras fases del procedimiento que a la defensa de Errejón no le han parecido tan mal, como que una funcionaria forense del juzgado emitiera un informe sin examinar presencialmente a la presunta víctima de la patada y pusiera por escrito que no le hacía falta verlo en persona para confirmar que ella no veía relación entre la patada de la que acusan a Errejón y la hernia del denunciante. Como no podía ser de otra manera la juez insistió en que se llevara a cabo ese examen forense presencial afeando lo que a todas luces parece una mala praxis de la forense. Pero no, Errejón a quien recusa es a la juez, básicamente, por hacer su trabajo.